NUEVO MARCO ESTRUCTURAL PARA LA REGULACIÓN DE LOS JUEGOS DE AZAR.
Iniciamos un año que en su comienzo viene plagado de muchas novedades. Se inicia un nuevo año, el 2020, una nueva década (aunque para algunos no comienza este año sino el siguiente). Como todos los años el mes de enero viene cargado de nuevos propósitos para el año que comienza. Y comienza una nueva legislatura, con un nuevo gobierno de coalición, y un nuevo Ministerio de Consumo dirigido por el nuevo ministro Alberto Garzón.

Entre todas estas novedades, unas recurrentes, y otras con valoraciones dispares según pertenezcas a una parte de nuestra sociedad o a la otra, nos encontramos con un nuevo marco estructural donde se enmarcará nuestra lucha contra la proliferación sin control de los espacios destinados al enriquecimiento con los “peligrosos” juegos azar.
En su discurso de investidura el pasado día cuatro de enero, el ahora investido presidente del gobierno Pedro Sánchez, se refirió a la industria del juego con estas palabras textuales:
“Este gobierno va a actuar con decisión en otro ámbito de creciente preocupación, es el de la prevención de adicciones. Vamos a regular la publicidad de los juegos de azar y de apuestas en línea. E introducir medidas de información, gestión y educación del consumo de juegos de azar.
Impulsaremos criterios homogéneos con las Comunidades Autónomas para evitar que los locales de apuestas puedan abrir en determinados horarios y que limiten su cercanía a centros escolares como hoy en día ocurre en muchas ciudades de nuestro país, desgraciadamente.
Y vamos a reorientar la tasa administrativa del juego de los operadores en línea para destinar un porcentaje a medidas preventivas de sensibilización y de reparación del uso de la actividad del juego”. Pedro Sánchez

Ya en el programa de gobierno firmado por el PSOE y Unidas Podemos incluyeron como una de las prioridades del nuevo ministerio “una regulación urgente de los juegos de azar para prevenir y frenar la ludopatía” de forma similar a la del tabaco. Para su consecución Garzón encabezará una cartera que incorpora entre sus competencias la ordenación del juego, hasta ahora adscrita al Ministerio de Hacienda. Es decir, se busca promover el consumo saludable a partir de “la autoconciencia y la autonomía del jugador” y “prevenir, anticipar o identificar” el juego problemático.
Pero todo esto pueden ser sólo las típicas promesas electorales. Ahora toca plasmar estas voluntades en realidades. Lo que sí parece estar claro, es que “los propios movimientos populares y asociaciones” que luchan día a día contra esta lacra y sus consecuencias, ha devenido en este replanteamiento de la estrategia política a seguir.
Aquí os dejamos el contenido programático del preacuerdo alcanzado entre el PSOE y Unidas Podemos para conformar Gobierno, que en su punto 2.10 recoge las siguientes propuestas sobre regulación de los juegos de azar.
2.10.- Prevención de adicciones.
2.10.1.- Regulación urgente de los juegos de azar para prevenir y frenar la ludopatía.
Aprobaremos una regulación de la publicidad de los juegos de azar y apuestas en línea, de ámbito estatal y similar a la de los productos del tabaco.
Introduciremos medidas de información, gestión y limitación del consumo de juegos de azar en el marco regulador de los juegos de azar y apuesta en línea, con el objetivo de reforzar la autoconciencia y autonomía del jugador de cara a prácticas de consumo saludable y para prevenir, anticipar o identificar la generación de patrones de juego problemático.
En el marco de la Conferencia Sectorial impulsaremos criterios homogéneos con las comunidades autónomas para evitar que los locales de apuestas puedan abrir antes de las 22.00h y que limiten su proximidad a centros escolares.
Promoveremos la implicación de los operadores de juegos de azar y apuestas en el desarrollo de acciones de información, prevención, sensibilización y reparación de los posibles efectos indeseables derivados de la actividad de juegos de azar.
Reorientaremos la tasa por la gestión administrativa del juego que pagan los operadores en línea con el fin de destinar un porcentaje a iniciativas preventivas, de sensibilización, de intervención y de control, así como de reparación de los efectos negativos producidos por la actividad del juego. Estableceremos la obligación de que los locales de juego y apuestas abiertos al público cuenten, en su entrada, con un cartel de advertencia sobre los peligros de la ludopatía, con un contenido y proporciones análogas a los que aparecen en las cajetillas de tabaco.